Desde muy pequeño lo afirma: Será futbolista profesional. |
Texto y fotos: FutbolConnect Venezuela
El
escritor argentino Jorge Luis Borges, describía a la vida como un jardín de
senderos que se bifurcan, así como divergió el camino de Jeremy Marín cuando le
perdió el cariño a su primer deporte practicado, el béisbol, para ponerse a
jugar al futbol y soñar en grande (hoy) de la mano de la Escuela Juan Arango.
Tenía
10 años cuando su padre José (mejor conocido como Cheo), lo descubrió llorando en su cuarto y le
confesó que ya no deseaba seguir en el deporte de las bolas y los strikes y
ahora su anhelo era jugar futbol, que desde pequeño jugaba con sus amigos en la
calle, una de las tantas que hay en su pueblo, un hermoso lugar llamado Las
Vegas, municipio Rómulo Gallegos del estado Cojedes.
Hablaron
con el director de la Escuela Comunitaria de Iniciación Deportiva “Nuestro
Futbol” (hoy Deportivo Alianza), Juan Carlos Mendoza, quien lo admitió sin
inconvenientes; las practicas se hacían también en el Estadio Municipal de Las
Vegas, marcando así sus primeros pasos en el balompié.
“Cuando
empecé era delantero y jugaba bien, pero durante un juego en el Club Canarias
íbamos perdiendo y no llegaban balones arriba, me molesté y bajé a ayudar en la
recuperación de la pelota, entonces el profe me dijo que me veía bien de
mediocampista, me empezó a probar allí y me gustó”, aseveró Jeremy.
Desde
entonces su posición favorita, la de volante cinco, le acompaña e identifica a
donde va. Prolijo en la creación de juego y en frenar las embestidas del rival,
siente que desde su trinchera puede ayudar más al equipo. En la Serie Plata
Carabobo-Aragua 2017, capitaneó a la sub 18 que resultó campeón del certamen y
ahora, en 2018, jugará la Serie Oro con la sub 20.
LA FAMILIA Y LOS ESTUDIOS
El
volante de 18 años es disciplinado y centrado, de verbo fluido y sereno, no
duda ni un instante en afirmar que será futbolista profesional y sabe lo duro
que debe trabajar para conseguir ese objetivo.
Sus
padres, José (Cheo) Marín y Nurys Betancourt, ambos docentes de profesión, lo
acompañan siempre a donde va, demostrando un apoyo incondicional. “Ellos me han
ayudado a llegar hasta acá. Hubo un partido donde marqué un gol de tiro libre,
papá lo estaba filmando con la tableta y la tuvo que soltar para abrazarme porque
fui a celebrar con él”, contó
Al
profesor Juan Carlos Mendoza lo tiene en su corazón, asegura lo trató muy bien
en sus primeros pasos, guiándole en todo momento y todavía mantienen una
relación cordial y amistosa.
Jeremy,
se graduó de bachiller en la Unidad Educativa de Talento Deportivo “Luis
Salcedo” de Las Vegas y recuerda con especial cariño sus años en la
institución, junto a profesores especialistas que guiaron también sus primeros
pasos.
Sus primeros pasos como futbolista fueron en el estadio de Las Vegas |
DE ECID “NUESTRO FÚTBOL” A LA ESCUELA
JUAN ARANGO
El
26 de enero de 2015 es fecha bien recordada por Jeremy, ese día lo llevaron por
primera vez a la práctica de la Escuela de Futbol Juan Arango, ubicada en San
Joaquín estado Carabobo, gracias a las buenas relaciones entre Cheo y Julio “El
Pollo” Garabán, entrenador tinaquero que trabajaba en dicha organización. Allí
permanece en la actualidad, creciendo sostenidamente y preparándose para cosas
grandes, como la Serie Oro 2018.
“Era
otro mundo para mí, diferente a lo acostumbrado, hay tres canchas de grama
artificial, nunca había jugado en una de esas y me costó adaptarme. Desde el
principio me han tratado muy bien”, expresó el mediocampista.
SUEÑOS Y METAS
Jeremy
no lo duda ni un instante, su sueño es ser futbolista profesional y se dice de
forma literal, sueña mientras duerme que está jugando en un campo profesional.
Es su mayor deseo, es consiente que debe luchar cada día por eso, trabajar
constantemente y sin parar porque, afirma, hay que tener constancia y
disciplina.
Confiesa
abiertamente su gusto por la creación de juego y darle opciones de ataque a su
equipo, pero entiende que su fuerte debe ser siempre el cortar a los rivales. Admira
y tiene como referente al capitán de la selección nacional de Venezuela, La
Vinotinto, Tomás Rincón; y también sigue mucho la forma de desenvolverse en la
cancha de Sergio Busquets, el 05 del FC Barcelona.
Sus padres, Cheo y Nurys, lo acompañan siempre. |
PADRES ORGULLOSOS Y EN RESPALDO TOTAL
Cheo
acompaña siempre a su hijo y en sus frases deja ver lo orgulloso que está de
él: “Es centrado y disciplinado, tiene sus sueños claros, cuando todos sus
allegados le preguntaban qué estudiaría, respondía directamente: yo voy a ser
futbolista profesional”. Luego de conversarlo con mi esposa, llegamos a la
conclusión que si ese es su deseo, allí estaremos para apoyarlo”, relató con
orgullo.
La
profesora Nurys también tuvo palabras de elogio para su hijo menor y tiene
claro su rol: “Jeremy es muy tranquilo, mi tarea como madre es apoyarlo cada
día, continuar con la disciplina, recordarle lo que debe llevar, que no se le
quede nada. Desde la casa vamos con él en sus sueños”.
Jeremy es un volante con buen manejo del balón. |